By Edith Loyola 
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, dio a conocer su plan nacional de seguridad, centrado en “atender las causas de la violencia” y con la promesa de evitar una “guerra contra el narcotráfico”. Esto ocurre en medio de un récord histórico de más de 190 mil asesinatos durante el gobierno anterior.
“No va a regresar la ‘guerra contra el narco’ de (Felipe) Calderón. No buscamos ejecuciones extrajudiciales, que era lo que ocurría”, afirmó Sheinbaum este martes. “¿Nosotros qué vamos a usar? Prevención, atención a las causas, inteligencia y presencia”.
Durante su conferencia matutina, el gabinete de la presidenta informó que el sexenio del expresidente Andrés Manuel López Obrador rompió el récord de homicidios acumulados, registrando una tasa de 26.6 asesinatos por cada 100 mil habitantes de enero de 2018 a septiembre de 2024.
Al respecto, Sheinbaum se comprometió a “fortalecer” la política de López Obrador de atender las causas de la violencia mediante programas sociales, especialmente dirigidos a los jóvenes.
“¿Qué vamos a hacer? Vamos a apoyar, ya una parte la venía haciendo el gobierno del presidente López Obrador, pero nosotros vamos a fortalecer esta parte de atención a las causas, eso es lo primero, y el año que entra ya entraremos con algunos recursos adicionales”, anunció.
Cuatro ejes de la estrategia federal de seguridad
Por su parte, el secretario de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), Omar García Harfuch, detalló los cuatro ejes principales de la estrategia gubernamental: atender las causas de la violencia, consolidar la Guardia Nacional, utilizar inteligencia contra el crimen y garantizar la coordinación entre las autoridades.
En particular, García Harfuch enfatizó la necesidad de “atender de manera prioritaria a las familias más vulnerables, reduciendo la pobreza, cerrando brechas de desigualdad y generando oportunidades para que las y los jóvenes tengan acceso a una mejor calidad de vida”.
“Esto nos permitirá, además, alejarlos de la delincuencia y del reclutamiento de grupos delictivos”, agregó.
El funcionario también destacó la labor de la Guardia Nacional, un cuerpo de 133 mil elementos creado por López Obrador que inicialmente era civil, pero que en septiembre pasó a formar parte del Ejército. Sobre las críticas acerca de la militarización, García Harfuch declaró:
“Es falso que haya militarización, lo que estamos haciendo es aprovechar las capacidades de la Secretaría de la Defensa Nacional para que no importe el tiempo y la Guardia Nacional se pueda consolidar”.
Controversias y objetivos futuros
Cabe mencionar que la estrategia de emplear a las Fuerzas Armadas en tareas de seguridad pública ya había generado una gran controversia, la cual revivió con la masacre de seis migrantes de Egipto, Perú y El Salvador durante un operativo militar cerca de la frontera sur de México el 1 de octubre, primer día del mandato de Sheinbaum.
Ante estas acciones, el gobierno estableció tres objetivos principales, según el secretario de Seguridad. El primero es la disminución de la incidencia delictiva, enfocándose principalmente en los homicidios dolosos y delitos de alto impacto, como la extorsión.
Los otros objetivos son “neutralizar generadores de violencia y redes criminales, con atención a zonas de alta incidencia delictiva”, y “fortalecer” las capacidades de prevención de las policías.